El pasado domingo se ha celebrado el retiro de adviento animado por el párroco, Juan Carlos Macías.
Se ha iniciado la reflexión con el texto, una imagen y una canción sobre el evangelio de Lucas en el que Marta y María reciben en su casa a Jesús para centrarnos en lo esencial, en EL esencial, recordándose la importancia del servicio, pero también el riesgo de la dispersión que conduzca al olvido de a quien se sirve; profundizando en la importancia del cuidado y de la contemplación en la acción, en el servicio que son dos tareas fundamentales en el seguimiento de Jesús.
En un segundo momento y en “una vuelta interior” se ha recordado la necesidad de abrir las puertas a Cristo desde la acogida y la escucha desechando la idea de sentirse protagonistas en la relación con Dios y rechazando una mayor valoración a la acción que a la oración y al hacer y dar que al escuchar y recibir. Se ha valorado que Marta y María se centran en los esencial, en el esencial que es Jesús. Ambas abren camino de encuentro con Cristo, una el del servicio al prójimo y otra el de la escucha de la Palabra, que no son contrapuestos ni enfrentados sino complementarios entre sí para ser y vivir como discípulos y misioneros.
En un último momento y “delante del Señor” se ha pedido perdón por las veces que no se abre la vida y el corazón a la presencia de Jesús; se han presentados los desvelos y la entrega con sus dificultades y quejas; se han dado las gracias por la paciencia y disposición de Jesús a mostrar lo importante y se ha repetido en nombre propio que solo una cosa es
necesaria, haciendo referencia al texto evangélico: Marta, Marta, solo una cosa es necesaria.
Se ha terminado el encuentro con la celebración de la eucaristía, una comida compartida y un bingo solidario en los salones parroquiales.